Skip to content Skip to footer
La diosa

del Cacao

En la cosmovisión maya, el cacao no era un simple alimento. Era un regalo sagrado de los dioses, una medicina espiritual, un canal de conexión con la tierra, los astros y el alma.
En el corazón de esa tradición se encuentra IX Cacao, la diosa del cacao, también conocida como la Mujer del Cacao o Señora del Corazón Dulce, la diosa de la fertilidad y la abundancia.

IX Cacao es una diosa femenina, amorosa y abundante. Representa la fertilidad, la vida, el renacer, pero también la dulzura que brota después del dolor. Fue ella quien, según los abuelos y guardianes del saber ancestral, enseñó a los pueblos a cultivar el cacao, a honrarlo con gratitud y a usarlo en rituales de sanación, conexión y celebración.

Los mayas no tomaban cacao para calmar la sed. Lo bebían en ceremonias sagradas, antes de la siembra, en nacimientos, bodas y transiciones. Preparado con especias, flores y cantos, era una bebida de poder que abría el corazón y limpiaba el espíritu. El cacao era tan valioso que se usaba como moneda, y solo los sacerdotes y nobles tenían acceso a él en su forma más pura.

Hoy, en IX Cacao, honramos esa herencia milenaria. Nuestro nombre es un tributo vivo a esa diosa que habita la tierra, el árbol, el fruto… y el corazón de quienes siembran con respeto.

El cacao sigue siendo para nosotros más que un cultivo:

Es un puente entre mundos, una medicina de amor y presencia, y un símbolo de abundancia consciente.